El caniche enano es una raza que combina la inteligencia, la elegancia y una personalidad llena de ternura. Si alguna vez has visto a uno, seguramente te habrás sentido atraído
Perros y garrapatas: cómo quitar una garrapata a un perro
Con el buen tiempo, la sana experiencia de sacar a pasear a nuestro perro puede traer consecuencias indeseables, sobre todo si lo hacemos por zonas de zarzas, hierba en estado salvaje o zonas de paso de ganado. Las garrapatas están ahí, al calor y al abrigo de la maleza, esperando que pase su víctima. Y su víctima puede ser nuestro perro.
Saber cómo quitar una garrapata a un perro es importante, pero quizá lo sea más prevenir que este ácaro se enganche a nuestra mascota. En el mercado existe una gran variedad de productos, collares preventivos y sprays, para evitarlo, aunque no todos los propietarios de animales son conscientes de las graves consecuencias que puede acarrear una sola garrapata.
La garrapata puede ocasionar a nuestro perro la temible enfermedad de la piroplasmosis. Las garrapatas se enganchan a las zonas del perro cuya piel es más fina, como orejas, espacios interdigitales, pliegues del abdomen… Las garrapatas no solo se enganchan, sino que segregan un líquido que crea una especie de cemento que une su trompa chupadora con la piel del animal. Así, el protozoo ‘Babesia Canis’ puede ser transmitido a nuestro perro.
Los síntomas de la enfermedad cursan con fiebre muy alta, orina color café y una total inapetencia y cansancio. La urgencia por llevarlo al veterinario debería ser inmediata.
El contagio no es tan fácil, pero si no hemos tomado la precaución de proveer al perro de un desparasitador externo y nos encontramos con el desagradable bicho en nuestro querido amigo, deberemos proceder de la siguiente manera:
Habrá que proveerse de unas pinzas, un algodón, un frasco de éter y un desinfectante. Es preciso ‘anestesiar’ a la atacante mediante el éter, lo que provoca una ineficacia para su trompa chupadora y el principio del alivio para la piel de nuestro animal. Luego, con un tirón seco mediante la pinza, habrá que extraer el parásito completo, y luego desinfectar la herida, por minúscula que sea, con un producto veterinario a base de yodo.